Lo que pase en Vinci, se queda en Vinci.
Antaño escribí para la revista digital GameIt un especial sobre True Detective donde, además de dejar claro que es una de las mejores series actuales, explicaba muy por encima la telaraña de historias que en ella se habían creado con un resultado brutalmente espectacular. Casi 3 años después he decidido ver su segunda temporada que llegó con muy malas críticas, por culpa principalmente de la excelente reputación creada por su antecesora. ¿Ha sido tan desastrosa como dicen las malas lenguas?
Está claro que su primera parte (gracias a la narración en dos espacios temporales y misticismo) supuso un desafío para el espectador, cosa que en esta nueva temporada no tenemos. Tampoco tenemos una pareja de detectives protagonistas; tenemos un trío de lo más variopinto. Este elenco lo foman Colin Farrell, Rachel McAdams y Taylor Kitsch como tridente policial y que se completa con Vince Vaughn en su papel de mafioso de la ciudad ficticia de Vinci. Asesinatos, corrupción, misterio, tiroteos y venganza se mezclan en una historia tan simple que al final cuesta seguir el hilo por culpa del exceso de infomación.
El mayor problema que le veo yo a esta temporada (además de un tema central mucho menos atractivo) es que es inevitable compararla con su primera parte y eso le hace un flaco favor. Es una buena serie, de eso no cabe duda, complicada a momentos pero con capítulos (3, 6 y 8) realmente impresionantes donde es ineludible que al espectador se le suba la adrenalina. Una trama correcta, un Vince Vaughn que se come la pantalla con su actuación y un final realmente espectacular hacen que True Detective 2 pase sin pena ni gloria por las teles de medio mundo pero puede que, en un futuro no muy lejano, se le empiece a dar el valor que realmente se merece.
* LO MEJOR:
- Su reparto. Se le coge cariño a cada uno de ellos.
- Escenas de acción realmente conseguidas.
- Su capítulo final de hora y media de duración, un cierre espectacular.
* LO PEOR:
- El tema que trata puede resultar poco atractivo.
- Hay momentos puntuales donde el espectador se pierde entre tanto nombre propio y suposiciones de los protagonistas.
- Los títulos de crédito introductorios de cada capítulo, mucho menos adictivo que el de la anterior temporada por culpa de la canción elegida.
* NOTA: 6,90/10